Sinopsis:
En una época hostil, en la que el destino de las personas se decide por el color de la piel, surge el coraje y la esperanza a través de una esclava que desafiará las reglas y los convencionalismos de su tiempo, llevando a cabo una serie de propósitos que, de descubrirse, pondrían en grave peligro su vida. Su historia de amor prohibido con un hombre blanco y el gran secreto que esconde, revelarán que su existencia y la de los que la rodean se sostienen sobre frágiles columnas de cristal.
Amores, traiciones, miedo y perdón, se entremezclan en una historia apasionante a la sombra de una guerra en la que un país entero luchará sin tregua.
Mi opinión:
Una novela que, de verdad, me ha sorprendido ya que trata
muchísimas cosas, como la esclavización de negros antes y durante la guerra de
la independencia, como era el trato con el hombre blanco que, si me trataran a
mí así y, para colmo sin poder quejarme porque si no iban a acribillarme a
latigazos no sabría que hubiera hecho, ya que me lo puedo imaginar gracias a la
película esa de Leonardo DiCaprio del diamante de sangre.
En concreto trata sobre una mujer a la que, por así decirlo,
la ascienden de esclava recogiendo algodón a ser esclava doméstica de la abuela
de la familia, algo así como una auxiliar de enfermería en una residencia de
ancianos, algo así parecido y, aunque en un principio, solo le cae bien a la
matriarca de la familia ya que ésta le enseña a leer y a escribir aunque ella más
o menos tenía una ligera idea y le ordenaba, sobre todo, que le leyera un poco
a diario y, después ella lo transcribía, con su propia letra intentando
reproducir todas las palabras y “tomando prestado” papel y una pluma, cosa que
si la hubieran pillado se hubiera liado la gorda, menos mal que el único que lo
sabía, no había dicho ni pío debido a que poco a poco se había ido enamorando
de ella.
La novela habla un poco del llamado ferrocarril subterráneo,
que era, en plena guerra de la independencia, la única vía de escape en la cual
los esclavos podían huir hacia la libertad con ayuda de algunos de los que
deberían de ser sus verdugos pero que por alguna razón u otra, no se veían con fuerzas para tenerlos como
esclavos, o su corazón les dictaba que los dejaran libres. Ese término me
resultaba muy familiar porque hay un capítulo de Los Simpsons en el cual trata
ese tema ya que Lisa, encuentra el diario de Elisa y hace un trabajo acerca de
lo vivido en aquella época y, aunque no es del todo cierto lo que cuenta, como
le hace ver Milhouse después, al final desemboca con que el esclavo de Burns
acaba escapando gracias a la madre de Elisa y acaban casándose, por tanto, los
Simpsons descienden del esclavo y no de Hiram o como se llame.
La verdad es que esta novela me ha hecho recapacitar en
muchísimos aspectos ya que uno no sabe nunca de quién fiarse y todo lo que
tuvieron que pasar los pobres esclavos.
La pluma de la autora es muy ágil y amena, además de querer
dejarme con ganas de más acerca de los protagonistas y sobre cómo pudieron
encajar todas las cosas y todo lo del ferrocarril subterráneo, que debería de
ser muy difícil escaparse aun habiendo muchísima gente dispuesta a ayudar.
La novela me ha trastocado y la he amado con la vida y
espero leer pronto algo más de la autora.
Nota: 10
Muchas gracias por tus palabras, te lo agradezco mucho. El trabajo que conlleva escribir una historia se compensa con comentarios como este. Un beso
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