Sinopsis:
Nora Miller regresa a casa, vuelve a sus raíces llevando consigo un pasado de sombras y dolor. No sabe lo preciosa que es porque se empeña en esconderse detrás del mostrador de una cafetería. No imagina que su belleza causa estragos en las calles de New York.
Samuel Moore se divorcia y busca refugio en el único sitio donde es verdaderamente feliz; el hospital donde trabaja como oftalmólogo. Lejos de focos mediáticos, separado del negocio familiar, quiere ser un Moore, pero a su manera.
Descubre la novela de Arelys Y. Guerra, llena de emociones que te harán vibrar desde la primera página.
Mi opinión:
Una novela que he tenido la oportunidad de leer y que me ha
encantado de principio a fin, así es esta novela de Arelys Y. Guerra.
En esta novela tenemos una protagonista que ha recibido todo
tipo de abusos por parte de su pareja, lo que es una víctima de violencia de
género, vamos. Sus padres también habían muerto lo que la deprime aún más,
aunque la gota que colmó el vaso fue lo de su novio. Ella, como bien ha quedado
plasmada en algunos momentos, es una
negra del Bronx, vamos, una mulata que vuelve con una persona que es como su
segunda madre para poder recuperarse de todo lo que había vivido.
Nuestro protagonista es un hombre millonario, no dirige la
empresa familiar como Christian Grey o alguna cosa de esas sino que es un
médico en el mejor hospital de la ciudad, aunque su familia tiene una gran
empresa de joyería que, además es una marca muy prestigiosa. Está divorciado,
pero su mujer es la clase de persona que yo no querría, es una persona ruín,
mezquina y que se cree mucho mejor de lo que es y eso, aunque intente sacar de
sus casillas a nuestra protagonista, no es nada de lo que se tenga que
preocupar porque esa tipa no le llega ni a la punta del tacón.
Un medio accidente, un teléfono estropeado y un intento de
ligue es lo primero que necesitan nuestros protagonistas para encontrarse y
conocerse, claro que no es que sea algo demasiado bueno porque ella está
enfadada y él se comporta un poco como un auténtico acosador, claro que venga
un tipo sensual a nuestro trabajo a darnos el último modelo de teléfono salido
del mercado y que nosotras seamos como una especie de pobres, más o menos, pero
chicas normales que se dedican a servir cafés pues como que dulce es.
La novela ha tenido muchos dejes que me ha gustado mucho
aunque ha habido una pequeña cosa al final que creo que lo incluirá la autora
en una novela anexa, básicamente y que ya estoy deseando leer puesto que esa
escena es como la guinda que le falta al pastel, por así decirlo.
La novela me ha gustado muchísimo y ya espero saber que más
tiene para ofrecernos la autora.
Es una belleza de novela. La trama es deliciosa y adictiva. La recomiendo
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